Si ya os contábamos en este artículo algunas de las razones por las que viajar a Canadá, ahora ya podemos sumarle una más: la solidaridad.
Un pequeño pueblo de Canadá, Saint George en Ontario, ha adelantado la Navidad dos meses para hacer feliz a un niño, enfermo terminal. Los médicos han dado muy pocas esperanzas a los padres: el pequeño Evan, de 7 años, lleva luchando años contra un cáncer cerebral y le queda poco tiempo de vida. La madre pidió a su familia y amigos que la ayudaran a recrear una atmósfera navideña para celebrar la festividad y la respuesta no se hizo esperar.
Crearon un evento en Facebook, una campaña de crowdfounding para sufragar los gastos, se imprimieron flyers y así llegaron a cumplir la ilusión de Evan: siete mil personas se reunieron en Saint George para celebrar la Navidad el 24 de Octubre.
Turísticamente hablando este pequeño pueblo de Canadá no ofrece grandes monumentos; sí hermosos paisajes (algo a lo que estamos acostumbrados en este destino), locales de restauración y cercanía a algunos puntos de interés como Brantform, población conocida como “The Telephone City” ya que allí habitó Alexander Graham Bell.
St. George no tiene grandes monumentos, pero claramente sí grandes personas de las que muchos medios informativos internacionales se han hecho eco.
