¿Qué puedes ver en Jerusalén? ¿Cuáles son los sitios más interesantes que no te puedes perder esta Semana Santa?
Jerusalén es una ciudad que atrae continuamente a viajeros de las tres grandes religiones. A medida que se acerca la Semana Santa, su interés crece por momentos. Nos apasionan los parajes antiguos y misteriosos que encontramos en sus calles; nos llama experimentar su historia, su presente y, sobre todo, el sentimiento religioso que alberga y estimula a muchos viajeros.
¿Qué es lo que encontraremos en una escapada a Jerusalén? Para que un viaje sea completo y perfecto, es imprescindible visitar algunos de los puntos más famosos y no dejar de lado ninguno de ellos.
Qué ver en Jerusalén y alrededores
Con frecuencia los turistas que van a Jerusalén lo hacen dentro de rutas que también incluyen Tel Aviv, el Mar Muerto, o incluso Petra (Jordania), de la que ya hablamos en este blog.
Sin embargo, Jerusalén es una ciudad que vale la pena conocer en profundidad, y sobre todo, sin dejar de visitar otra gran ciudad de gran interés histórico y religioso: Belén. La ciudad donde nació Jesús, situada detrás de la margen occidental o en la zona de Cisjordania, a tan sólo 9 kilómetros de Jerusalén, nos invita a conocer la Basílica y la Gruta de la Natividad, o lugares tan bellos como la ruta de los Pastores.
Por lo demás, Jerusalén es pura historia y belleza. En ella encontraremos la Ciudad Vieja, el Muro de los Lamentos, la Explanada del Templo, la Vía Dolorosa, la Iglesia del Santo Sepulcro, el Cenáculo (donde se cree que se celebró la Santa Cena), la Tumba del Rey David, el Huerto del Getsemaní, la Basílica de la Agonía, el Monte de los Olivos, las ruinas de la Ciudad de David y otros muchos lugares históricos que se mencionan en la Biblia y el Corán.
Hay también una zona moderna en Jerusalén que también merece la pena, como el Museo del Holocausto o el Museo de Israel, en el que se puede ver el Santuario del Libro, donde se encuentran los famosos manuscritos del Mar Muerto y una maqueta de cómo era Jerusalén en los tiempos de Jesús y la época del rey Herodes.
Muchos viajeros optan por visitar Jerusalén mediante un viaje organizado, ya que es una forma más cómoda y segura de viajar, sin enfrentar los imprevistos que pueden surgir en lugares como Jerusalén. Con la confianza además de que no se perderán nada en una ciudad que es todo historia, que nunca deja de sorprender y, sobre todo, que puede llegar a convertirse en un verdadero laberinto.
